En la gama de productos de Clariana se incluyen papeles fabricados con pastas alternativas a la madera, como por ejemplo, el cáñamo.  El cáñamo es una fibra anual de origen vegetal que destaca por alcanzar su máximo potencial fibroso solo unos meses después de la siembra. Es durante esta fase cuando las fibras de cáñamo están más maduras y tienen una mayor longitud y resistencia, lo que las hace ideales para la producción de papel. 

El uso de pastas de origen diferente a la madera es solo uno de los aspectos que reflejan el compromiso de Clariana por la preservación del medio ambiente.  El cáñamo, así como otras pastas procedentes de plantas anuales, representa una materia prima renovable y sostenible.  Al optar por esta materia prima, Clariana contribuye a la reducción de la deforestación y promueve prácticas más respetuosas con el medio ambiente en la industria del papel.  Clariana busca fomentar el uso responsable de los recursos naturales y apoyar la transición hacia una economía más sostenible.